Universidades privadas en España un negocio en expansión entre religión y capital

Tras el análisis comparativo que hicimos de la Universidad Pública y la Universidad Privada en España, me llamó la atención cómo estaban pivotando las Privadas desde su origen principalmente religioso hacia un control por diferentes fondos. El hecho de poner nuestra educación privada a merced de intereses económicos podría condicionar la capacidad de los futuros jóvenes.

¿Cómo se ha convertido la educación universitaria privada en un negocio multimillonario?

El sector de las universidades privadas en España ha dejado de ser un ámbito residual para convertirse en un mercado que mueve más de 3.700 millones de euros al año. En poco más de una década, el número de estudiantes se ha disparado y los campus privados se han consolidado como una alternativa real —y cada vez más rentable— a la educación pública. Estamos a punto de que el número de Universidades privadas superen a las públicas.

Detrás de este crecimiento hay dos grandes motores: la Iglesia Católica, con su red de instituciones históricas, y los fondos de inversión, que han encontrado en la educación superior un negocio estable, de alto margen y con gran potencial de expansión internacional.

¿Quién controla realmente las universidades privadas?

dueños de universidades privadas en España

Dominio histórico de la Iglesia Católica

La Iglesia Católica sigue siendo el actor más influyente del sector. Los Jesuitas gestionan universidades como Comillas, Deusto, ESADE o Loyola Andalucía. El Opus Dei está detrás de la Universidad de Navarra y la Universitat Internacional de Catalunya, mientras que la Asociación Católica de Propagandistas dirige la red de universidades CEU San Pablo, CEU Cardenal Herrera y Abat Oliba CEU.

A ellas se suman los Legionarios de Cristo (Universidad Francisco de Vitoria), el Arzobispado de Valencia (Universidad Católica de Valencia) o la Universidad Pontificia de Salamanca, gestionada por la Conferencia Episcopal Española. En conjunto, controlan buena parte de las universidades privadas más antiguas y consolidadas del país.

La irrupción del capital privado

En paralelo, los fondos de inversión han protagonizado las mayores operaciones financieras del sector. El caso más mediático fue la compra del 70% de la Universidad Alfonso X el Sabio por CVC Capital Partners en 2019, por 630 millones de euros. Poco antes, Permira había adquirido la Universidad Europea de Madrid por 770 millones y, años más tarde, vendió la mayoría al fondo sueco EQT.

También destacan las inversiones en educación online. En 2024, Sofina y Portobello Capital compraron el 24% del grupo Proeduca (propietario de UNIR) valorándolo en 1.400 millones de euros. Un movimiento que confirma que la educación digital se ha convertido en uno de los grandes nichos del sector.

Familias y fundaciones laicas

Más allá de la Iglesia y el capital riesgo, algunas universidades pertenecen a familias o fundaciones privadas. IE University fue creada por la familia Del Alcázar; Camilo José Cela, por la familia Segovia (SEK Education); y Nebrija, por la familia Villa-Celino. La Fundación AEB, vinculada a la Asociación Española de Banca, es titular de CUNEF Universidad, actualmente en proceso de venta.

También hay modelos alternativos, como Mondragón Unibertsitatea, una cooperativa sin ánimo de lucro, o la UOC (Universitat Oberta de Catalunya), una entidad privada con mandato público y precios regulados.

¿Cuántos estudiantes eligen universidades privadas?

Durante el curso 2023-2024, las universidades privadas españolas alcanzaron 452.952 estudiantes, lo que equivale al 25,7% del total universitario del país. En apenas diez años, la cifra ha crecido un 368%, impulsada especialmente por la enseñanza online.

La UNIR lidera el ranking con más de 90.000 alumnos, seguida de la Universidad Europea (30.000) y la Francisco de Vitoria (20.000). También destacan la Alfonso X el Sabio (17.000), Comillas (15.555) y la Universidad de Navarra (14.150). El grupo CEU, por su parte, distribuye decenas de miles de alumnos entre sus distintos centros.

Alumnos universidades privadas en España

En los másteres, el crecimiento es aún más acusado: la universidad privada ya matricula al 53% de los estudiantes de posgrado, y la modalidad online se consolida como la favorita.

¿Dónde se concentran las universidades privadas?

El mapa de la educación privada en España refleja una clara tendencia: la mayoría de universidades privadas están en comunidades de mayor renta per cápita. Cuatro regiones —Madrid, País Vasco, Navarra y Cataluña— concentran al 70% de los alumnos, pese a representar poco más de un tercio de la población española.

¿Cuánto cuesta estudiar en una universidad privada?

El precio medio anual en una universidad privada española oscila entre 6.000 y 14.000 euros, aunque algunas titulaciones pueden superar ampliamente esa cifra. En Medicina, por ejemplo, el coste total puede alcanzar los 145.000 euros. En universidades como CUNEF, la matrícula anual ronda los 10.000 euros.

Por comparación, una carrera en una universidad pública cuesta unos 4.000 euros al año. Aun así, las privadas suelen ofrecer sistemas propios de becas: la Universidad Católica de Valencia, por ejemplo, destinó 5,4 millones de euros a ayudas en un solo curso.

En términos macroeconómicos, el coste medio por alumno en privadas equivale al 75,6% del coste en las públicas, aunque si se mide por graduado, las privadas resultan más caras, con una media de 29.921 euros por estudiante titulado.

¿Qué papel juega la universidad pública en todo esto?

Las universidades públicas españolas siguen siendo el pilar del sistema, pero su financiación está estancada. En 2022, las 47 universidades presenciales públicas ingresaron 11.358 millones de euros, de los cuales el 65,7% procedía de transferencias autonómicas. El gasto en personal representa el 65% del presupuesto, lo que deja poco margen para innovar o expandirse.

El gasto medio por estudiante universitario en España fue de 14.432 euros, un 23,6% inferior a la media de la OCDE. Este déficit estructural limita la capacidad de crecimiento de la educación pública, mientras el sector privado aprovecha ese espacio con agilidad empresarial y financiación externa.

¿Hacia dónde se dirige el sector universitario privado?

Todo apunta a que la universidad privada seguirá creciendo. En apenas una década, el número de instituciones privadas se ha igualado prácticamente con el de públicas, y la expansión digital acelera esta tendencia.

Los fondos de inversión han transformado el modelo educativo en un negocio global y escalable, mientras la Iglesia Católica mantiene su influencia histórica en las universidades más consolidadas.
A la vez, la formación online se dispara, con más de 100.000 estudiantes en másteres virtuales, lo que demuestra el atractivo del formato flexible y profesionalizador.

Pero también crece el debate sobre la financiación pública: sindicatos y expertos alertan de que la falta de recursos en la universidad pública está dejando espacio libre al capital privado. En definitiva, España avanza hacia un modelo universitario dual, donde la elección entre accesibilidad y exclusividad marcará el futuro de la educación superior.

Conclusión:
La educación universitaria privada ya no es una opción minoritaria, sino un negocio estructurado, rentable y en plena expansión. La combinación de tradición religiosa, capital inversor y demanda creciente está redefiniendo el mapa académico español. La gran incógnita es si la universidad pública podrá adaptarse a este nuevo escenario o quedará relegada a un segundo plano en el futuro de la formación superior.


Publicado el 21/10/2025 / 7 minutos de lectura / España